Alabándote
¿Cómo podré agradecer
tanta bendición?
¿Cómo podré responder a tu amor?
Levantando mis manos, Señor,
declarando que Tú eres Dios
y dejándome llenar por el soplo
de tu amor.
Y alabándote,
y alabándote
y alabándote,
Señor, mi Dios (bis)
Quiero adorarte Señor
desde el corazón
y descalzarme ante ti, Santo Dios.
Tu perfume me inunda, Señor,
tu presencia está dentro de mi
y tu gracia se derrama por todo este lugar